sábado, 11 de octubre de 2008

My very own private adiction


Una teta voladora no identificada sobrevolando el Vacant Lot. No tenía otra forma permitida de tomar ese seno entre esas copas, ahí lo tienen.


Hace semanas, escuché que el buen David Duchovny, Mulder, admitió que él está en lado oscuro de un interés humano: La adicción al sexo. Por dicha afección, decidió internarse en una clínica y llevar un tratamiento, para dejar de pasar sus ratos libre en chats eróticos o andar de husmeacoños por las calles de Jolibud.


Un personaje tan pegado a la búsqueda de una verdad, a tal punto de convertirla en el centro de su vida, como Mulder, me hizo pensar que todos los que hemos pasado por eso, o seguimos ahí sin saberlo o no, tenemos un nivel de "adhesión" a ciertos asuntos. Ahora, este año, con toda la experiencia, buena y mala, acumulada, puedo concluir que toda adicción es perjudicial, incluso la adicción al agua (que puede desencadenar derrames celebrales en ciertos casos). Pero la del agua, definitivamente, no es la mía.


No diré lo mismo que Diegol en su cabecera, sino que iré más allá, a la verdad total. Señor director, señor juez, señor presidente del Tribunal: Soy gravemente adicto a las mujeres. Aunque suene a lema comercial de alguna telenovela protagonizada por Andrés García o Gustavo Bueno, es cierto, y en realidad es más reprochable de lo que pareciera.


Nadie nunca me dijo de lo mal que podía irme por eso porque "uno es varón", sí, "es natural" andar detrás de mujeres para un hombre que se precie de serlo, porque si no "sería medio 'rarito'", ¿no? Jamás pensé que eso tuviera que enfrentarlo de una manera similar. Asimismo, jamás se me advirtió de un posible desastre o simplemente, no leí las señales, y los testigos jamás me advirtieron algo peligroso, parecían divertidos, disfrazando sus complacencia con frases como "es de hombres sufrir", "ya se te pasará" o "eres lindo , encontrarás a alguien muy feliz".


Fui feliz, lo admito, y puede que lo sea ahora. Pero la tórrida felicidad, esa que lo hace sentir a uno más veloz que el viento y más ardiente que el sol, era la felicidad en el período de dependencia. Esos episodios me tuvieron preso, y la vez obsesionado por volver a llegar a esas etapas, de la único forma que conozco: A través de ellas.


Las veces en que pasó por mi mente la idea de que esto podía llegar a ribetes viciosos o de escándalo, simplemente trasladé el costo: No es mi culpa, es culpa de ellas por tener esas miradas, por tener esos rostros, por llevar tan lindo el cabello, por la suave forma que tienen sus vientres, sus brazos, libres de aristas caderas; por decir tantas cosas que me agradan, por hacer que las admire tanto, por querer que sea más y más grande o al menos hacerme pensar eso, por ser tan interesantes y hacerme llegar hasta su nivel, por sonreir tanto y tan abiertamente, que no deja lugar al compromiso, por excitarme de maneras como esta.




Aunque pueda parecer un aventurero que no soy, yo las amo, yo las quiero...


Ni amante del amor, ni enamorado perdidamente de ellas, ni huevadas afines. He estado loco por ellas, por las mujeres de mi vida, por las mujeres de mi muerte y las de mi desgracia. Para mí, todo lo bueno... tiene cara, cabello, piel, frente, ojos, brazos, senos, vientre, trasero, muslos y hasta pies de mujer. Hasta que lo bueno, algo similar al silencio, desaparece con su exceso; y luego, como el nutra sweet, esa dulzura comienza a cobrar no con simples caries...

¿Qué decir de los cambios? Son imprescindibles, inherentes a la vida, pero tantos... Tan superficiales algunos, tan esenciales otros, cambios de formas, de seres dentro de mí, cambios ropa, de rostros, de cabello, de cuerpo, de voz, de forma de hablar. Tantos, que de vez en cuando se me hacía difícil verme sin preguntarme por mi identificación. No sé cuan provechoso haya sido o es este camino, pero de hecho es costo, como esta aún vigente Reestructuración.


No podría usar el mediocre término "mesura". Lo mío es mayor a la comodidad, es estar a mis anchas pensando en los suelos, en lo bien que hago en una constructora y no en la bolsa, en como se me puede caer en cualquier momento el asunto o en como estoy pasando este mes de Octubre, rebosante en mi santoral personal. Ya no quiero causarme risa, mi metamorfosis dejó la etapa José José, y se centra en algo más autónomo: Un hombre, por sí y para sí, y quien ame que la ame, oferta expuesta, anzuelo lanzado y si no pica, pues a comer vegetales.


Y no debería olvidar el presente con el control: Puedo decir que estoy bien, sin temor a equivocarme, sin vértigo, sin adrenalina, pero contento.


Aún así, sé que en cualquier momento puedo estallar otra vez, supongo que para bien. Ya sé en qué carril debe haber combustión. No lo dudo, ya no necesito de cierto estimulante para... No tengo temor a darlo todo nuevamente, pero a su debido momento, en sus debidos plazos y, sobretodo, a quien haga méritos. Ustedes saben, quien juega mal no campeona...


13 comentarios:

Frankie dijo...

Qué buena teta la de esa foto!

Digo, qué buena foto la de esa teta xDD

Acuarius dijo...

a i me dijeron que si empezabas a hacerlo, no podrias aguantar sin hacerlo. Desgraciadamente tenian razon. :S

@webero01 dijo...

si eres adicto a las mujeres, supongo q sera como siempre querer mas y mas, osea nunca habra "la mejor",, siempre en buskeda? pasu, pa pensarlo xD ,,,

yo creo q seria mejor ser adicto, pero a una sola mujer, aunq suene utopico jaja,, saludos,,

luis dijo...

wena foto... cambiale de color a la fuente

NTQVCA dijo...

Buena foto de teta.
Yo pienso que a su edad haga lo que se le pegue la gana, porque lo que no se usa se seca o se descompone, así que suerte en los intentos.

Anónimo dijo...

Frankie: Sí, buenísima. Literalmente, ese sábado tuve los globos del cielo a mi favor.

Acuarius: Es cierto, el amor es una de esas drogas parecidas a la Coca-Cola...¡más y más!

Webero: Tengo fe en que la búsqueda acaba, o se prolonga, pero dentro de una sola mujer.

En efecto, es un escenario utópco, que sería perfecto de no ser porque, al menos en mi caso, no me ha durad mucho.

Luis: Gracias, ¿cambio en la letra?

Mexican: Es cierto, a mi edad aún puedo hacer lo que quiera, puedo elegir al patrón que desee.

En este momento, mi patrón en esos casos, soy yo mismo.

Vitalnn dijo...

Que bueno!!!


Me encanta la foto!!

El Chico Nube dijo...

Soy todo corazón y eso me hace mal
soy muy sensible a la belleza
por eso pierdo la cabeza
con tanta facilidad
socio de la soledad

Andrés Calamaro

Lolle dijo...

En la foto yo vi un ave con las alas desplegadas volando hacia el horizonte dejando un rastro mágico a su paso...

hasta que lei la descripcion

u_u

Mama novata y curiosa dijo...

SOLO TU PODIAS VER FORMAS RARAS A LAS NUBES JIJIJJI

CállateTú dijo...

Definitivamente deberías seguir con los intentos.

Puedes llegar a secarte.

Anónimo dijo...

Vital Silvia: Gracias, es el primaveral cielo limeño.

Chico Nube: Es cierto, para dejar de ser socio, hay que comenzar por adoptarla.

Mixifabi: Yo no, hasta he visto un vaivén, pero la nube pezón no ayuda.

Sheila: COmo te dije, en ese momento, sólo una cosa pasaba como importante en mi vida.

Tai-toi: En realidad, me has hecho volver a pensar en la posibilidad de secarme...

Y me temo que esté en camino...

Anónimo dijo...

Correcto mi estimado.

Quien juega mal, no campeona (ni mucho menos va al mundial).

En cuanto a la foto, te dejo una cita que una vez un pata con harta cancha me enseñó: mujer que no jode, no es mujer; y mujer que no tiene tetas, es tu mejor amigo.

Hablamos!