domingo, 28 de junio de 2009

Situaciones matapasiones I (La última salida de RR)

Imagen del genial Carlos Tovar, "Carlín", de La República.



Acabo de volver de la casa de F.


No fue una jornada exitosa en ese aspecto, pues volví a mi casa en bus (cuando sale bien, suelo caminar bastante), algo cansado y sintiéndome algo estafado por los famosos "Mushkins" que compramos antes de entrar al cine, después del café.



Vimos Up, muy buena película, pero definitivamente F no era la compañía ideal. De hecho, ya estaba recriminándome mentalmente, diciéndome "Oh, por dios, los cortos dulces y tiernos de Disney no dejan de existir. Definitivamente, esto no puede dejar la azúcar blanca ni con la fusión con Pixar, ¿qué hago viendo esto?" antes de la primera parte de la película, que relataba (de excelente manera) la historia de una de esas parejas que ya no existen, "puta madre, y yo quiero que se acabe esto rápido, ya no puedo cambiar a la actriz, no es el caso D x C del 2004", antes del conflicto de la trama.


Seamos honestos, fue una jornada matapasiones, no hay porqué culpar sólo al inadecuadamente tierno corto previo a Up.
Fuera de ello, la administración remarcó los siguientes puntos:


- En cuanto a las edades de mujeres, no hay lógica. Conozco a una niña de 18 años cada vez más sorprendente y bueno, F, tiene 23, pero no sé, como que hace falta algo. Suena a cliché, pero me gustan las mujeres MADURAS (en sentido estricto de la palabra, y cuando la palabra viene con chanfle).


- Lo que entra marchando por los ojos, puede salir saltando por el olfato, como aquella noche. Se veía F esplendorosa con su casaca roja y pantalón negro, pero olía a fresita, a pelotita Viniball.


-
Lo que entra marchando por los ojos, también puede salir escabulléndose por el oído, como aquella noche Hay dos temas de conversación que me disgustan haaaaaarto: Los perros y los chibolos. Especialmente si son tuertos o muy traviesos y escandalosos (los perros o los chibolos), más aún si la narración toma una voz aguda, más fresona que el propio olor a pelota... de Fresa con F de Fresa, caray.

- Cosas como los mushkins (o "kekitos" según Pyc, Biscotti, la mayoría de panaderías limeñas y, hasta entonces, yo), pueden costar el doble sólo por el nombre.

- Cada día siento menos ganas de abrazar a alguien, y más ganas de sentarme a escribir.

- Soy un hombre cada vez más complicado. Por lo tanto, necesito una mujer complicada, con un tono de voz de mujer, con interés en el mundo y con problemas (osea, problemas de verdad, no "problemas = resuelvo mis chongos internos jugando a hacer un chongo de mi chucha"), con o sin sobrepeso y si es posible, con más años que yo.


- No pregunto si es mucho pedir, porque no estoy pidiendo nada,
the greatest love of all is happening to me. Y bueno, digamos que llevar lo de hoy a buen puerto, hubiera sido algo similar a hacer cantar a Arturo Pomar en un karaoke la canción de Whitney.


Igual, me siento como Carl, sólo que no he encontrado aún a Ellie.



Chequen la voz de Arturo Pomar:



Ahora, comparen y traten de colocarla en esta canción (difícil, ¿no?):


martes, 23 de junio de 2009

Expediente N: Terrorismo

Expediente reabierto e incidentes recordados gracias a este post de Lisett.


Fui honesto al contárselo: "N, el deporte olímpico de las entidades públicas es la infidelidad, el salto femenino con trampolín. He sido testigo e incluso parte ocasional con gente del Ministerio Público, y aún con las distancias, no creo que sea distinto en INDECOPI". Y así, traté de darle una explicación de porqué el problema de su amigo y de un estimado ex vocal de INDECOPI y ex profesor de ambos (en distintas ocasiones y universidades), eran esencialmente lo mismo. Desde que a ambos se nos escapó, en diversas diligencias, que fuimos cornudos alguna vez, la relación abogada-chacal se hizo cómodamente horizontal.



Recién con el inicio del mes de Septiembre, pude aprender a remplazar el "doctora" por el N a requerimiento suyo. Recién a mediados de ese año pude flexibilizar mi tímido y casi reverencial trato camino a INDECOPI, al Palacio de Justicia o a Aduanas, por una conversación serena, irónica, algo distante que se unía con la personalidad también algo hermética de ella. Ese hermetismo me parecía puramente atractivo, contaminada la atracción con su altura, su cabello lacio, su cuerpo que se debatía entre la frugalidad y la esbeltez, sus anteojos antitransparentes, contaminada con su enorme parecido a la última campeona de esta casa (peligrosa para mí, que suelo relacionar parecidos físicos con parecidos psicológicos).


"No te metas nunca con nadie que chambee contigo, donde se come no se caga", pero nadie caga cuando tiene ganas de tirar con alguien o cuando está enamorado de alguien. Y era por eso que no creía en ese dogma "de fe", y era por eso que me encantaba la idea de su aparatosa destrucción, así como otros como "En la amistad no hay lugar para la atracción, se malogra sino; ni hablar entre dos amigos del mismo grupo", huevadas que impedían la realización del ser humano en defensa de... ¿de qué? De ideas, de éter, de una estructura ideológica prejuiciosa que para nada es un principio.


Eso le decía a mi compañera cuando se me hizo muy evidente mis ganas de darle otra cosa "grande y gruesa" aparte de la pizza Papa John's que quería que comiésemos en la oficina, al volver del Palacio de Justicia. Con D, mi compañera de chamba y de universidad, había la confianza y la intangibilidad que había con al enamorada de un buen amigo, por lo que no era problema hacer ese tipo de confesiones, con todo lo que implicaba: Una grande y gruesa, como a un queso suizo, como para que al día siguiente a esa noche de amor, belleza y deleite, ella pida en recepción que RR baje para que la suba a la oficina porque había venido en silla de ruedas, pero que la siente con cuidado en la silla, para evitar dolores.


Hace poco me encontré con D y nos pusimos a conversar, al respecto, sobre lo que pensábamos de esa mujer. Yo conocía algunos de sus secretos, ella conocía otros, aquellos que explicaban su permanencia en el estudio; a veces no la pasaba, me confesó, y le dije que hacía falta ser hombre para querer a una mujer como N, eso y dejarse limpiar el saco, dejarse abrazar de vez en cuando o embromar, según ella.


Me quedo callado, sonriéndole por un momento, y le confieso algo patéticamente dulce: Lo más parecido que tuve a una pelea-reconciliación de pareja en los últimos años fue una fuerte discusión que tuvimos en Noviembre, por el tema del Informe de una patente de fármaco, D recordaba, y pensaba en la semana casi entera que pasamos sin hablarnos más allá del deber, sin mirarnos, sin despedirnos. Y luego, me preguntó por el viaje a Aduana de Tacna en el que ella, D, no estuvo, unos días después de volver a hablarnos como un hombre y una mujer.



- Soy un terrorista del amor, ¿tú que crees, D?

- No sé que creer de tí - dijo sonriendo, entre divertida y espeluznada, estirando las manos y mirando hacia abajo, como preguntándose cómo podía seguir siendo amiga de un tipo como yo -. Puede que el doctor haya querido economizar en hospedajes, nunca supe que había sido de sus supuesto novio...


- Bueno, hay cosas que nunca habrás de saber...



Un día, presenté mi carta de renuncia, en cierta forma pensando en N y sintiendo a C, pensando en mi con N y C, sintiendo que ya no debía pensar en N y sólo en sí, pensando como iba a sentir dejar de pensar en N por lo que sentía por C, que era mejor pensar totalmente en C para evitar sentir más por N, en una perfecta ecuación cuadrática.


A los cinco días, en la tarde, horas después de un desafortunado evento desubicado en el espacio y tiempo, estaba retirándome, lamentando el error parcial de mi operación, en silencio, aún más al acercarse ella a despedirse, al tocar mi rostro con sus dedos, sus labios, y rodear mis hombros...



No toqué su rostro, ni su espalda, ninguna otra parte, simplemente no le acerqué mis manos. Ella era una mujer en ese momento no mi jefa, no mi compañera de trabajo, no mi colega. Una mujer como cualquiera de las de la oficina, como cualquiera del mundo, y mi único impedimento para amarla, o dejarle pensar ello, era que yo amaba a otra mujer.



- Discúlpame, D. En serio, ahora sólo fumaría en la terraza del estudio, un pucho compartido con N. (Lo admito, hay formas muy gráficas y hardcore de sentir, y saben que es así, frescura, sabor...)



RESOLUCION N-01


El vídeo de la canción "I'm so excited" de The Pointer Sisters, del disco Break Out publicado en 1983, fue anexado al post de fecha, con calidad de canción exclusiva de la incoada en el Expediente al que pertenece dicho post, Expediente C.


Concordando lo analizando en el presente informe con el resto de hechos registrados entre los meses de Agosto de 2008 y Enero de 2009, cabe señalar el error incurrido en atribuir al Expediente C la exclusividad e importancia de la canción mencionada en el párrafo precedente, llegando a la conclusión de que la identidad y pertenencia de dicha canción era de la incoada N, por el agrado mostrado por la misma.



POR TANTO, se procede a retirar del Expediente C la canción "I'm so excited" de The Pointer Sisters, del disco Break Out publicado en 1983, para incluirla en el presente expediente, de acuerdo a lo que corresponde.



domingo, 21 de junio de 2009

El día del padre!

Nada pues... UN ABRAZO A TODOS LOS PADRES!!!!!!!!!!!!


De hecho, me da vergüenza postear una cosa así, parezco uno de esos bloggers que tomó el Blogger porque el jai faif lo defraudó. En fin...


Hoy sí me toca pasarla con mi señor padre, ahora que el oleaje de nuestra relación filial es calmo, y que ya no soy un adolescente con ínfulas de James Dean, de constantes diferencias, diferencias... no sé, a veces pienso que si mi viejo y yo fuésemos contemporáneos y no parientes, no simpatizaríamos mutuamente.


Ayer no le di bola porque se pegó a lo de Kina Malpartida, algo a lo que no le di importancia, después de ver a Arturo Woodman con otros jugando a ser Don King, pero del coliseo Dibós. Bueno, algo sacaron de ver todas las películas de Rocky.





En fin, será de ir al teatro. Tengo que ofrecer a mi señor padre una alternativa a las películas mexicanas, que muy poco ayudaron a nuestra unión, por cierto; no sólo de fútbol vive el hombre. Muchas gracias, Pedro Infante de mierda...


Llega un momento en que todos los niños son nuestros hijos, y todos los hombres somos padres. Este es mi comercial favorito de paternidad:



martes, 16 de junio de 2009

La forma de comer chifa a precios módicos



Mi intención al buscar a Estonboi era simplemente la de conversar, pese a la hora y al gruñido de mi estómago. De hecho, si esa hubiera sido la intención, igual se vería obligada a contentarse con la frustración.



Para dos compinches semiprofesionales, no hay lugar mejor que un chifa. De hecho, el monólogo encontraba un mejor escenario en una mesa de estas, donde uno habla, frunce el ceño, gesticula, y el otro deja enfriar un poco su sopa wantan, luego comienza a comer mientras escucha:



- ...mira como se porta esta cojuda, como una drogadicta inmadura, carajo. Yo te apuesto que si yo fuera uno de esos drogadictos con los que solía KAS, lo contaría como si algo buenazo le hubiera pasado, pero no, quien agarró como un caballo fui yo, su buen amigo que no es drogadicto. Osea, a la mierda conmigo... tú sabes, Estonboi, que una mujer se merece un trato directamente proporcional a su percepción de tí como un hombre, ¿verdad? Aparte, son condenados siete años de aguantar sus problemas, sus aburridas historias con artistas, esquizoides, peperos, drogadictos, de chequear como se pone cuando no toma su pepa, de escuchar los problemas de mierda en los que ella misma se mete, y de ponérsela cuando sabe que nadie más quiere hacerlo...



- ¿Te la KAS? ¿En serio? - Dijo Estnboi, paralizando su faena con el fideo chino -.



- Claro que sí, dos veces. ¿Ves que eres disperso, que no prestas atención? Eso sólo le pasa a los drogadictos.


- Ya huevón, controla tu ira - dijo, sonriendo mientras terminaba de tragar, como quien ve un berrinche de niñato -. Contrólate, no uses esa frase, "prestar atención", que es de discusión de maricas. Te pones tan hembrita, que no te entiendo, si te la tiraste, ¿por qué te quejas?



- ¿Y por qué entonces sí, y ahora no? Osea, un drogadicto le dice que se ve más delgada y ya, se computa el último estornudo de chancho, y encima me manda a la mierda, ni siquiera es un poco amable o tiene algo de gratitud...


- Ya, ya, para, has utilizado la palabra "drogadicto" como seis veces en tres minutos. Ni siquiera es tan buena, es tan mediocre que no te has enamorado de ella...



- Es mi KAS, vivo en una sociedad que protege la propiedad y otros derechos afines sobre los bienes. Y sí, carajo, tienes razón, ¿cómo enamorarse de ella? ¡Si ha contado su versión de la historia entre sus amigas más KAS! En realidad, soy una amenaza no drogadicta para ella...


- Puta, que rica esta sopa, RR. Pide un menú nomás, ya sé que no has fumado, pero las amarguras con wantan al toque se van... y hablemos de cosas ricas, puta, este chijaukay les ha salido bien...



- ¿Te has dado cuenta que casi siempre, las hijas de los dueños de los chifas son chinas buenotas?



Ambos miramos hacia el mostrador del chifa. Era una figura evidentemente mestiza, de cabello negro muy largo, clásica característica facial asiática a excepción de occidentalizada nariz y una figura cuya peruanidad en formas nos hacía pensar en que la comida peruano china colabora tremendamente en el desarrollo de la belleza.



- Oe, es cierto, otro día hay que ir al chifa que está por mi jato, falta saber a que hora le toca estar ahí a la china esa - sugirió Estonboi, picaresco -.


- Si tú fueras yo, a estas alturas ya sabrías vida y milagros de ella - mirando de reojo el plato de Chijaukay de Estonboi.



- ¿Y qué es de Lula?



- Que será, no le hago mucho caso a las mujeres que no me hacen caso...


- Sí te hace caso.



- Si yo fuera tú, me creería enterito ese cuento. Que todas las chicas del Sansil me hacen caso, que me hacen caso a mí, pero salen con patas pitucos, y luego...


- ¿Qué es de ella?



Vi una doble oportunidad, y no la desaproveché.



- ¿No sabes? - Le pregunté, ocultando una sonrisa burlona con mi mano -. ¡Está embarazada! ¡Y ese hijo no es tuyo!


Estonboi se quedó callado, sin saber que decir, que sentir y como asimilar. Sabía lo que sentía, era algo similar a lo que sentí cuando me dijeron que Fabiola de la Cuba tiraba con Yehude Simon, o que Ellen DeGeneres era lesbiana, esa sensación de que el campeonato estaba definitivamente perdido (si eso era jugar un campeonato, claro).


- ¿Qué pasa? Tu chaufa se va a enfriar.



- No quiero comer - indicó Estonboi, tapándose la cara y riendo nerviosamente -. No quiero, no puedo creerlo, por dios...



- Sí, es madre - confirmé, muy periodísticamente -. Mientras tú y miles de fanáticos más planeaban como llegar a ella, la mujer más popular de la facultad quedaba preñada de un joven gerente de no sé donde, confirmándole a sus seguidores lo ya conocido: Ella nunca será suya.



- Puta madre, puta madre...



- Eston, ¿no vas a comer? Queda bastante en tu plato...



- No, no quiero comer...


Pedí mis propios cubiertos, una botella de agua y no pude evitar reir con la reacción de Estonboi. El Chijaukay estaba mejor de lo que esperaba, ideal para conversar con la chica del mostrador, mientras Estonboi confirmaba que jamás podría ganarse la Tinka. Quise animarlo de todos modos, estuvo tan cerca de campeonar como de ganar la Tinka con una sola jugada.



- Tú sabes Estonboi, no hay muestra más sincera de aprecio hacia una persona que el deseo sexual hacia ella. Puedes pensar que soy un terrorista por pensar así, pero vamos, Lula Vía y Rada no era sincera contigo, lo hubiera sido se te hubiera conocido...



- Sí.



- Ya, por favor, tenemos más de 20 años, estamos un poco grandes para eso. Este Chijaukay está buenísimo, cuando paguemos la cuenta, perseguiremos realidad, ya no tendremos que sufrir por los hijos de otros, sino vivir y triunfar por nuestros propios hijos, o en el caso de Konrad, huir...



Un vídeo esencial de mi etapa semiprofesional y mis paseos hacia INDECOPI. Mi reino por una camisa como la que usa Cerati en este vídeo.

viernes, 12 de junio de 2009

El Secreto

No fue la primera vez que un cartel me hacía abandonar el bus en el que viajaba. De hecho, soy propenso a bajar del bus por cualquier motivo atractivo.


Digamos que la diagramación era interesante, el título parecía el de una nueva puesta en escena y... nada, el último factor era apoyado por la presencia de Alberto Ísola en la esquina inferior izquierda, y la frase "El poder de la atracción" (a partir de aquí, si eres peruano(a) y no sabes quien es Alberto Ísola, puedes considerarte desterrado(a) de este blog). ¿Una obra con un nombre así? ¿Ísola actuando un personaje de un guru tipo Hitch (salvando las distancias) o de un pata que necesite urgente asesoría para esos menesteres? Igual, parecía que sería una buena puesta y... bueno, tampoco es descabellado (sic) que el actor peruano pueda hablar sobre atracción, no estamos hablando de Felpudini.




Uno puede caer fácilmente en la trampa del desorden de las carteleras callejeras, perderse entre conciertos en el Parque de la Exposición, el centro de convenciones X, un afiche a favor de los derechos de la mujer y un fragmento del "Poder de la Atracción". Era cosa de acercarse, una cosa de esas, al menos por esos segundos, podría ser interesante para un sujeto mayormente desafortunado en esa cuestión tabú de secretos, poderes y atracciones.


No creo que algún actor que se respete deje que le pongan como seudónimo "Mr. Fire", mismo actor portorriqueño. De hecho, a dos metros, la figura de Ísola se deformaba, se convertía en una más pequeña en todo sentido, a la del (para mí) desconocido conductor del noticiero del siete que se parece a Jorge Basadre y creo, también es merecedor de un apodo tan infamante como "Cabeza de p..." (una más chiquita, que lástima que ese programa no reciba llamadas al aire).


La idea de una obra de teatro se desvanecería completamente, al ver la imagen de la esquina inferior izquierda.
Bob Proctor (una especie de nombre científico para un mostacero), canoso, ese pata ni de vainas tenía como hablar de atracción. De pinta variable, podía ser fácilmente un protagonista de comercial de pañales geriátricos o Sal de Andrews; incluso su traje blanco lo podía hacer pasar piola como un pastor lo suficientemente prestigioso como para no necesitar de la señal de algún canal peruano de televisión abierta. Ni actores, ni obra, ni posibles coaches de conquista femenina (claro, en ese cartel no estaban las palabras clave: "Mujeres" y "Conquista"). En fin, al menos sé que me ahorro varios mangos, y me conformaría con la reseña de Dedo Medio.


3-Jun-2009, Teleticket de Metro de Jesús María


Sólo recuerdo haber hecho cola para entradas del concierto de Soda Stereo; mejor dicho, sólo para ese concierto, recuerdo una cola larga. Es más, no recuerdo una cola tan larga en este Teleticket para ningún evento artístico (deportivo sí, el Universitario - Cienciano del Apertura del año pasado); eso me hacía sentir el hombre más desafortunado del mundo, el más necesitado de ese dichoso secreto: Había una docena o q
uincena de personas delante de mí, demorándose, contando su plata, pagando con tarjeta (cosa que había que hacer en una caja, mientras se le esperaba), demorando más... y yo sólo quería mi entrada para Móvil, pero antes de Agosto, antes de que mi último carnet de medio pasaje expirase.



A que no saben que evento quería ver el gentío que iba delante y detrás de mí en esa cola. Antes de comprar mi entrada, pude curiosear la lista de precios para la conferencia antes mencionada, me sentí afortunado por querer ver la obra dirigida por un reciente maestro mío (muy buena, de hecho tienen que verla y prestar atención a los dos personajes maternos), y claro, protegido económicamente por mi escepticismo hacia las "artes claras" del desarrollo personal.

miércoles, 10 de junio de 2009

Abriga a tu hermano



Queridos lectores, amigos, y tú, despistado lector que por primera vez llegas a este blog:



Este post es nada más para contarles que en mi trabajo, LivinginPeru.com estamos en una CAMPAÑA (conjuntamente con Condor Travel) para llevar ayuda a los niños de las zonas altoandinas del sur del Perú, una campaña llamada “Abriga a tu hermano”.



Y lo mejor es que todos, TODOS ustedes pueden ayudar donando ROPA DE INVIERNO, alimentos, medicinas o dinero: los datos necesarios los encontrarán en el artículo que comparto acá con ustedes.



Las donaciones de ropa se pueden llevar a:



- Condor Travel Agency (Armando Blondet 249, por Canaval y Moreyra in San Isidro).
- San Isidro: Ugarte y Moscoso 710 San Isidro (detrás del Pharmax)
- Monterrico / La Molina: Las Amatistas 151 – dpto # 201, altura cdra. 7 Av. Circunvalación El Golf Los Inkas (al lado del Vivero)



Donaciones en efectivo se pueden depositar en:

Asociación Civil Sin Fines de Lucro Condor Travel- Wings accounts:

Banco BBVA Continental, cuentas:
SOLES 0011-0910-0100127897-75
DOLLARS 0011-0910-0100127889-72


Gracias por la información y el texto a María Isabel Guerra (Las burbujas recargadas).

domingo, 7 de junio de 2009

Fútbol, amor y lágrimas

Lima, 7 de Abril del 2009


Es extraño ver a Estonboi tan pero tan conmovido, que comienza a profundizar en su chorrito llamado amor. En el fondo, se me hacen reconfortantes estos momentos porque, en tal sentimentalismo, mi amigo "entiende la problemática", al menos caminando rumbo a la Universidad de Lima, más allá de la medianoche...


E: ¿Esto no es Salamanca?


RR: No, Salamanca es una porquería, este barrio se ve decente y estético...


E: RR, me desesperaba cuando comenzaban con lo del fulbito, carajo. (En ciende un cigarrillo, y exhala con furia el humo) Me jode Calheira, es casi la misma huevada que Malingas...


RR: ¿Fulbito?


E: No sé si te has dado cuenta, pero la percepción del espacio del futbolista peruano se pierde en más de 100 metros, ¿se te ocurre por qué?


RR: ¿Por que está acostumbrado a los flexibles 40 metros de una cancha de cemento?


RR: Sí, pero la amplitud no lo libera, sino que se convierte en un laberinto para él, sin muros, sin caminos, simplemente en un interminable laberinto llano, donde no sabe que hacer.


RR: Fácil que por eso se cansan tan rápido. A veces, la amplitud también es un laberinto, se tocan de nervios...


Estonboi soltó un resoplido con los que anuncia que hará un admisión pesada para su persona, de esa que sólo se hacen en momentos como el partido de hace una hora, de apertura total del alma, corazón y vida.


RR: Por eso somos tan inconsistentes, y en el fondo nos sentimos protegido por eso...


RR: (Extrañado, como si hubiera perdido el hilo de la conversación) ¿Qué hablas?


E: Estamos acostumbrados al fulbito...


RR: Como que no somos tan dotados como para el fútbol, pero igual, no creo que lo ardiente del fútbol entre en la cancha de fulbito.


E: No, sabes que me refiero al otro deporte rey... no sé contigo, fácil sí, pero se me hace tranca jugar "Amor", cuando lo hago me pierdo, porque estoy acostumbrado a jugar "Agarre", "Tire", "Flaca", "Gileo", "Afane", y dime si el fulbito es una versión a escala del fútbol...


RR: No, no creo... lo otro tampoco, pero yo, no estoy seguro, me complico con las escalas.


RR: También juegas, y sueles perderte en la cancha amplia del juego "Amor" como si no pudieses jugar fútbol, sin contar tus feos problemas para culminar jugadas de gol.


RR: ¿Crees que somos los únicos? Cada vez es más difícil encontrar con quien jugar.


E: No, como el fulbito, está enquistado en el chip, aunque no lo quieran admitir casi todos los que nos rodean...


Me sentí un poco menos solo en ese momento. Es algo que suelo sentir cuando obtengo una respuesta reveladora, definitiva, que ya no da más pié a continuar hablando sobre el tema.


RR: Eston, yo pensé que estabas acostumbrado al fullvaso y a la bata.


E: No. Al contrario, se me hace preocupante que hayas dejado el fullvaso y el cigarro...


RR: Es lo mejor, eso afecta mi definición, mi habilidad frente al arco. No hay como, la gente se ha desgastado jugando fulbito...


E: ¿Tú crees?


RR: No lo creo, estoy seguro. Ni siquiera estoy seguro de poder dominar tanto terreno...



martes, 2 de junio de 2009

Silencio a plena luz del día



Por la costumbre, no me esperaba nada muy reconfortante de la mañana de cumpleaños. Martes, 6:10 AM, ya estaba despierto pero oía el movimiento de la casa para el desayuno (por la fecha, desayunaríamos juntos), la torta y claro, los saludos mientras salía de mi habitación. Abrazos, besos, sonrisas, en voz baja, que por alguna razón me hacían sonreir sinceramente, no por razones de compromiso o gratitud solamente.



Entre al baño, abriéndome la bata, sin prender la luz, mientras escuchaba sólo unos cuantos murmullos, pasos suaves, y más lejos, el repase de unas llantas sobre la pista ligeramente mojada. No recordaba que hubiese llovido, tal vez sólo era rocío, neblina condensada, felizmente estaba en medias y eso era suficiente para un clima tropical como el de Lima (tropical, aunque se parezca a Londres hoy), junto con agua caliente saliendo de la ducha. Pedir calefacción sería admitir que se puede prescindir del calor humano, del calor de un cuerpo y una piel, imposible para mí. La ducha suele ser una zona neutral de ruido, un totalmente eficiente asilo silencioso para quienes como yo, querían alejarse del fuego cruzado del ruido de todos los días, de todos los meses, de todas las Limas.


6:33 AM, yo recuerdo que a esta hora, este día, la infancia hace 15 años aún dormía, aún soñaba con dibujos animados, no tenía porque levantarse por ser vacaciones. Tengo un deseo, dicen que es más efectivo debajo de la ducha que a la luz de la vela; debería probar, generalmente no tengo fe en los pozos de los deseos ni en los pedidos cumpleañeros, vamos... Al salir, seguimos conversando, bajito, como si evitáramos despertar al resto de la gente que vive cerca de nuestras casas. Un leve aumento de decibeles implicaba una advertencia por parte mía, pues yo ya había pedido mi deseo, y porque me interesaba "no despertar a los vecinos, ni siquiera a los Malacara porque ellos se levantan a las 11". Sin embargo, alguien quiso estirar el pecado...


- A ver hijo, uno, dos, tres... cumplea...!!!

- No, no, por favor, padres. Este año no...


- Pero hijito, no hay cumpleaños completo sin cantar el Happy Birthday o aunque sea Las Mañanitas...

- Discúlpame, esta grosería la voy a utilizar por el bien: Las mañanitas es una mariconada que sólo se canta en México...


- Entonces...


- Por favor, es mi día, simplemente no prendan ninguna luz ni hagan ruido alguno por unos minutos.


Mis padres me miraban incrédulos, mi madre se paró para encender la radio, pero la detuve en silencio, moviendo la cabeza. En ese estado, sólo miré la luz de la vela, evité emitir cualquier sonido para que no surja una cadena que no podría controlar.


Era delicioso, imaginar el pasado, el poder del audio de hace cientos de años, cuando bien se hubiese podido escuchar desde mi ubicación susurros marinos, el discreto curso del río Huatica, a menos distancia. Y comenzaba a oir el paso de esporádicos buses, cada vez más grandes y sosegados en ruido y velocidad, sin voces humanas, que iban siendo suprimidos por ruidos de instalación de rejas del corredor de la Av. Brasil, sobre las vías del tranvía, de su acompasado y esplendidamente calmado paso, del roce violento de sus antenas con el cable, en algún cruce problemático, algo no pensado en el momento de su instalación.


El silencio había incrementado mi poder de percepción en el espacio y tiempo, no debe ser mentira eso de que el silencio es el peor escondite de algún secreto o mito.
No abrí los ojos, la presencia humana se había casi suprimido y una ocasión como esa sólo se tiene una vez.


Un aplauso lo perturbó todo, me hizo fruncir el ceño, y salió de mi control, no podía con las ansias cumpleañeras de mis padres y su horror al silencio. Todo tiene su final, lastimosamente; ya creo que viene siendo hora de titularse, entrar en planilla como abogado y costear más momentos de silencio...


(Carajo)