miércoles, 10 de diciembre de 2008

¿Quién no tiene un pata Milkito?

¿Quién no tiene un pata Milkito?



Eso pensaba mientras cruzaba el puente Los Ángeles, un día especial, lo suficientemente especial como para pensar en el apodo de mi acompañante y no en lo que solía pensar cuando iba camino al Bosque: "Por aquí vivía Banchero Rossi".



Milkito es uno de esos tíos que me lee como a un cartel monumental. Ha estado en nuestro último título de campeón, así como fue testigo de la tragedia posterior y de una buena porción del período de convalescencia. Ya en Venezuela, país en el que radica desde hace mucho tiempo (o radicó, porque está pensando seriamente en regresar al Perú), se enteró de la verdad de los hechos, muy preliminarmente, así como de las peripecias de estos años. Y realmente yo no podía decir lo mismo de él.





M: Detesto esa canción mugrosa de Suárez Vertiz...


RR: Sí, el tío dejó de simpatizarme desde hace cierto tiempo. Más precisamente, desde que se disolvió Arena Hash.


M: No me refiero sólo a eso, me refiero a la canción. O tal vez no se aplica para mí...


RR: ¿Quien podría saber? No saliste huyendo del país, al menos no por cuestión económica, aquí estaba tu universidad, tu casa y tu club.


M: Sí, pero tú bien sabes que eso no se puede llevar muy bien, sin lo que te menciona el huevón en su canción. Como la mayoría de peruanos en Caracas, me fui porque de este país algo me apestaba, algo personal... y seamos honestos, Venezuela sigue siendo el mismo paraíso de Por estas calles...


RR: Somos amigos desde chibolos, cuñao.


M: Sí, lo suficiente como para que tú me traigas hasta aquí en tu carro, y yo te haga entrar con mi... ¿trajiste tu carnet?


RR: Clarines. Ese pata es mi brother, me va a dejar pasar de todas maneras; habla, Jorge, ¿qué tal? ¿Hay bochas hoy?



La respuesta fue afirmativa. Entramos y nos enrumbamos al extremo este del club, cerca de los bungalows, donde está el circuito de las bochas. Era cierto lo de Milkito, ¿qué le puedes decir a alguien que abandona el país porque su gente no se cansó de decepcionarlo? ¿Qué amigos, qué lugar, qué querer? Recuerdo ese día: Milkito se fue con su mamá y una de sus hermanas, casi sin despedida, con poca gente alrededor, y por la hora, con la apariencia de una huída. Eso es una de las cosas que más me vacilan de Milkito: Su gallarda y hasta cómica aceptación de incompatibilidad con el país, con el limeño, con esa clase media de verdad, de domingos en restaurantes, con ganas de parecer ricos y no verse pobres, de adicción a los sit com gringos.


RR: Después de lo que te conté, ¿volviste a saber de Diana?


M: Sí, pero ya no me interesó, recuerda que estaba saliendo con Luciana...


RR: No jodas, ¿tanto tiempo?


M: Sí, pero ahí nomás terminó la cosa. Es que cometí un error forzado, maestro: Me enamoré más cuando vi que la broma con ella se iba a poner más difícil y más demorona.


RR: Nunca se divorció, ¿verdad?


M: Sí, y yo andaba molesto con esa huevada, pana. Pero cada vez que nos encontrábamos y después de que me decía que había peleado con él, yo me hundía en horas de ilusión. Incluso me ilusionaba más cuando se refería a él como "el gordo".


RR: Será de cariño, brother...


M: No, nica, pero pienso que a un marido se le comienza a decir así cuando ya no hay nadie que perturbe o cuando ya le perdieron el respeto.


RR: ¿Ambas cosas a la vez?


M: Creo que sí, eso, tal vez, no sé. Pero igual, salí perdiendo, cuando una mujer no cambia al primer aviso, no lo hará nunca; perdí tiempo, mucho tiempo...


RR: No fuiste el único... el otro pata...


M: No sé, ah, fácil ni se enteró el huevón, nis e dio por aludido, y se la siguió comiendo o comiendo hasta doble, no sé. En una relación con cuernos, hay demasiada libertad de tránsito por ambos lados... eso te faltó con LMS, abrir tus pistas, hacerte el loco, en vez de ponerte arisco con los cojudos de su facultad.


RR: Jajajaja, cuando lo hagas tú, te sigo, Milkito.


M: Creo que no debí pedirle que haga algo más conmigo. Fui un imbécil. Hay mujeres casadas que están para divertir a otros, hay que tomarlo deportivamente, y no tan competitivamente.



Tomamos la caja de bochas, compramos un par de chelas, y tratamos de acercarnos lo más posible al cholón con las bochas de nuestros respectivos colores. Nunca en nuestra infancia jugamos con cánicas, tal vez por eso, al crecer, nos gustó tanto un juego tan similar, pero en versión a escala, y con un sonido de madera, de sensaciones diversas, el del choque de la bocha con el muro del circuito.


RR: ¿Quién te dateó lo de Diana?


M: Javicho, pues. ¿Quién más? Creo que se quedará en Maracay, se hizo pataza de Holber.


RR: Holber es la cagada, ¿qué es de ese brother?


M: Trabaja en una compañía de diseño gráfico, la hace, maestro. ¿Sabes? De haber hecho nosotros lo que nos gustaba más, mucho más que lo demás, aunque sea muy íntimo, podría habernos ido mejor económicamente hablando.


RR: Mal que bien, mi carrera tiene nichos para todos, felizmente. No te ofendas, compadre, pero eso no pasa con la ingeniería.


M: Pero me doblo si me mandan a Puerto Ordaz, flaco. Un par de añitos ahí, y me aseguro por unos diez años más, cuanto menos. Habla, ya que no tienes guata que ocultar, ¿un piscinazo?


Me leyó la mente, porque lo primero que hizo al llegar a la zona de piscinas fue agarrar un par de tumbonas para pensar en el piscinazo, estando a pasos de la piscina.


RR: ¿Te has dado cuenta que solemos hacer lo mismo?


M: ¿Qué?


RR: Ponernos a pensar si es buena o mala idea justo antes de tirarnos a la piscina.


M: No nos queda otra cuñao. Hemos desperdiciando nuestras mandíbulas y juventudes tirándonos a la piscina seca varias veces, eso nos ha hecho algo timoratos...


RR: Es cierto. A veces pensaba, e incluso pienso, que no puedo acercarme a una mujer.


M: Eso es mejor que pensar que es mejor no acercarse, porque puede que su pecado original ser tener algo contra uno. Pero lo tuyo no es sólo eso...



Milkito se quedó callado. Como dije, me conoce, posiblemente es una de las 5 personas sobre la faz de la tierra que me conoce mejor que nadie, por lo que prefirió ser suave, prefirió encender un cigarrillo y reclinarse bien, mientras yo adopataba una postura acorde, para comenzar a hablar en voz orgullosa de (precoz) experiencia de vida, en tumbonas llenas de tías y jovenzuelas fácilmente escandalizables.



M: ¿S?


RR: LMS


M: Sí, esa la que vivía por Zárate creo...


RR: Esa misma...


M: Ella te cagó. Hay un RR anterior a Mayo del 2002, y uno luego de eso. No sé si con Diana me pasó lo mismo, no me he dado cuenta, ¿tú que crees?


RR: Te veo normal, pero creo que te dejó la destructiva instintividad de formar triángulos, triangular, aceptar que haya tres en un espacio de dos...


M: A tí, el miedo a apostar, a perder todo lo que ya tenías por un mes y días de locura de amor... ¿no te la tiraste, no?


RR: No.


M: Mal que bien, era un lomón.


RR: Me hubieras dicho que te gustaba, así te la endosaba a tí, tú no conocías a Diana, yo enchufaba con su amiga Andrea, no me fijaba en Zárate, y todos tan felices como siempre...


M: Recuerdo que llenábamos estadios...


RR: Recuerdo que fui campeón, de todas maneras.


M: Estadios...


RR: Como Duran Duran... ¿tocaron en Caracas?


M: Sí, no fui. Dicen que estuvo hasta el reculo el concierto ese.







RR: Sí, como Autocontrol...


M: Llenar el estadio de San Isidro...


RR: ¿Quién pega, Journey o Autocontrol?


M: La versión de Autocontrol de Faithfully me parece mucho mejor que la original...


RR: Yo creo lo mismo, sobretodo porque se la dedique a la tal LMS.


M: Sorry cuñao, por meter dedo en la llaga, pero es necesario, ¿te desquitaste?


RR: Sí cuñao, como que la dejé en el aire al menos tres meses más en cuanto a chamba se refiere. Su vida sentimental esta hasta el reculo por jugadora, así que quise cagarla en algo que de verdad le doliera: Recuerda que también soy abogado...


M: Puta, no puedo creer que sigas siendo abogado...


RR: Pero puedo jatear tranquilo, la deje fuera del TC, y como buena, había renunciado a su oficina para entrar al TC.





M: No jodas, ¿en serio?


RR: Así es, cara de nuez.


M: Puta, que cague de risa, jejejejeje, estás realmente mal de la cabeza... entonces, ya tienes chamba para rato...


RR: No, no me gusta el constitucionalismo. Aparte, eso es para practicantes, estoy a semanas de ser bachiller y pocos meses de titularme. Pero con cagarla un poco, puedo conformarme...


M: Y no es para menos, eso de "evitar que ese tipo de conductas se propalen en contra de cualquier hombre es necesario". Ya sabía, jajajajaja, sigo sin creer que seas abogado...


RR: Creele a las cifras, a Autocontrol, a la vida, al grado de bachiller. Como tu bien dices, es cosa de tirarse a la piscina.


Me paré, caminé hacia el trampolín, di un pequeño puntillazo y cai en el agua.



6 comentarios:

Anónimo dijo...

Pero cuñao, en relación de tres siempre hay uno que sale perdiendo. Y eso no admite prueba en contrario, mi estimado doctor.

Alucinante que a tu ex la hayas dejado fuera de carrera para el TC. Ojalá yo pudiera vengarme de alguna manera de mi ex maldita.

"Pero con cagarla un poco puedo conformarme..."

Jajaja!

A mi tampoco me vacila mucho constitucional.

Que te vaya chévere en el TC.

Lara Holmes dijo...

Esas jugadoras no valen la pena y me alegro q la hayas dejado sin trabajo :-D

Angela Espinoza Hermoza dijo...

Yupi! Ya tengo fuente en el TC... Y yo pensaba que vengandome era mala, dejarla fuera del TC... pucha, k malo... jiji

suerte cuando elijan al nuevo pdte, que la están haciendo larga...

Lisett dijo...

Nunca me gusto Constitucional...
mi profesor fue una basura conmigo.

Eso de la venganza nunca la avalé...
pero eso demuestra una vez mas que los hombres son mas vengativos que las mujeres.

Suerte en tu nuevo puesto (si lo entendi asi) y si estan pidiendo practicantes pasame la voz que estoy desactualizada de todo el mundo :P

Anónimo dijo...

Alexis: Ese es el problema de Milkín, quería sacar puntos en un partido de dos.

Lara: No sólo por jugadora, sino por otras cuestiones.

La hice explotar de amor, pero también la pude (puedo) hacer reventar por pura ira.

Angeitamoza: Lo del TC, todo, felizmente, es Vox Populi, de todos modos me enteraré de algo, aunque poco me importe.

¿Sabes? Me dan curiosidad tus técnicas vengativas.

Lissett: A mí tampoco me gustó, pese a que tuve buenos profes, igual no terminó de llenarme, como el 90% de mi carrera.

Los hombres somos más vengativos porque somos los que más carne ponemos al asador en esas contiendas.

Aclaración general:

1) No trabajaré en el TC, cumpliré mis 4 meses en mi actual chamba y luego...

Lo de LMS fue por puro animus vendetti o animus jodiendi.

Era una de las formas que tenía para vengartme, herir donde más le doliera. Como dije en post anteriores, su vida sentimental también es un fracaso, así que poco importa; al menos no tanto como la competencia abogadil, y demostrarle quien es papá, y dejarla fuera.

Lo más gracioso es que, según fuentes muy bien informadas, había renunciado a su chamba anterior para entrar al TC. Si supiera a todo lo que renuncié yo, se daría por bien servida.

Lisett dijo...

Bueno hablando de otra cosa,
hay un concurso en mi blog del derriere bloggero del año, habla te animas?